Elon Musk, dueño de Tesla, no para de generar controversias: después de meter a Twitter en una montaña rusa por su fallida intención de compra de la red social, ahora los medios en Estados Unidos descubrieron que contrató a la consultora MWW PR para monitorear los comentarios de sus empleados en las redes sociales sobre supuestas prácticas laborales abusivas.
El propio presidente Joe Biden salió a criticar a Elon Musk por esas presuntas prácticas y por no permitir la agremiación de sus empleados. Aunque un editorial del diario The New York Times calificó al mandatario norteamericano de injusto, porque destaca a Ford como ejemplo y a Tesla como disvalor, cuando -según el diario- Tesla genera muchos más puestos de trabajo en Estados Unidos que cualquier otra automotriz.
La consultora explicó a la cadena CNBC que tomar el monitoreo de redes sociales por parte de agencias de PR es una práctica habitual del sector para que las corporaciones entiendan las conversaciones sociales, una actividad que a veces en el periodismo es malinterpretada como una suerte de “vigilancia” o “espionaje”. estilo “Big Brother” en la novela 1984.
El comentario del diario indica que Biden no estuvo inteligente en criticar a Tesla, porque Elon Musk, de ideología más bien pro-demócrata, ahora afirma que va a votar por un republicano en la próxima elección. Musk tiene casi 100 millones de seguidores en Twitter solamente. Aunque se calcule que un cuarto son bots, lo que le queda es diez veces más que a cualquier gobierno.