El ala de medios de comunicación de la agrupación fundamentalista estuvo al frente de la distribución de videos a través de medios sociales y agencias de noticias durante los últimos 12 meses.

Los videos normalmente contenían atrocidades tales como decapitaciones y fueron usados como propaganda e instrumento de reclutamiento. Sin embargo, parecen ya no estar logrando el efecto deseado, y ello explica el cambio de estrategia, según Chris Calland, director senior de Cuentas de Hanovre Communications.

Calland dijo a PRWeek: “Estado Islámico es repulsivo, pero lamentablemente no todos sus miembros son estúpidos; los videos de ejecuciones fueron una movida calculada: quisieron aterrorizar a sus opositores, intimidar a la gente íntima para que se arrodille a su voluntad y reunir a sus reclutas demostrando su seriedad”.

“Los principales medios de comunicación transmiten cada vez menos los videos de Estado Islámico, lo que sin duda hará pensar a la agrupación si los videos tienen que ser aún más violentos o directamente replantear su propaganda”, explicó.