El estudio encontró que la mayoría de los ejecutivos de alto nivel −a través de una amplia gama de industrias, incluyendo finanzas, salud y manufactura− clasifican a sus organizaciones por encima del promedio en la gestión (72%) y la construcción (78%) de una reputación positiva. Sin embargo, esos mismos ejecutivos tienen muchas menos certezas sobre de la capacidad de sus equipos para identificar los riesgos de reputación antes de que se conviertan en crisis (53%) o desarrollar estrategias para mitigar el riesgo (45%).
“Muchas crisis que surgen podrían minimizarse −o evitarse por completo− con una estrategia más proactiva para identificar, controlar y medir los diversos riesgos que pueden dañar la reputación de una empresa. La construcción de estrategias de auditoría y planificación de riesgo de reputación en el marco de las responsabilidades de una organización puede ayudar a las empresas a evitar importantes golpes a sus marcas “, dijo a Bulldog Reporter Melissa Lackey, presidente y CEO de Standing Partnership.