Magic Kingdom: las controversias culturales en USA se devoraron al dircom en tres meses
Geoff Morrell era el dircom de Disney en Florida, pero la empresa de la magia y Micky Mouse lo terminó echando luego de poco mas de tres meses de haber asumido el cargo de máximo comunicador del gigante del entretenimiento.
Los medios de Florida informaron que la suerte de Morrell fue sellada tras su pelea con el gobernador republicano Ron De Santis, considerado potencial presidencialble para ocupar el lugar de Joe Biden.
El rol de Morrell como máximo dircom y lobbyista de Disney a nivel mundial queda dividido en dos, y se hicieron cargo Horacio Gutiérrez, tomando el lobbying y public affairs global, Kristina Schake, recientemente incorporada, asume la comunicación, y Jenny Cohen, la Sustentabilidad.
Morrell no soportó una tormenta en las redes sociales alrededor de una ley conservadora que buscaba restringir la educación sexual y -particularmente- alentar debates sobre la orientación sexual en el aula. Los demócratas -en minoría en el estado de Florida- llevaron su activismo contra la ley a las redes sociales, y empleados de Disney, miembros de la comunidad LGBTQ+ reaccionaron airados contra la ley denominada sarcásticamente “No digas gay” y acusaron a Morrell y el CEO, Bob Chapek, de dejarlos solos.
La respuesta de Morrell, sostienen en el sector de PR, fue tardía y demasiado tibia.
Pero los medios también notaron que para Morrell fue demasiado tener que controlar al mismo tiempo los mensajes en el sonado juicio de Johnny Depp contra su ex esposa Amber Heard.
Finalmente Disney anunció sin mucho ruido que Depp no volverá a ser el pirata Jack Sparrow y que buscarán a otro antihéroe para Piratas del Caribe. Previsiblemente, la decisión también le costó pérdida de reputación a la empresa fundada por Walt Disney y una tormenta en las redes sociales de los fans de Depp que creen que Amber realmente era una “mujer golpeadora”.
El despido de Morrell y los cambios en la comunicación de Disney apuntan a dejar atrás los enfrentamientos y escándalos y salir del foco mediático en el que lo metieron los conservadores, particularmente Fox News y los escandaletes en la prensa amarilla.
