Basta poner Andreani junto con vacuna, y el buscador de Google encuentra más de 90 mil vínculos. Por noticias, son 40 mil. Fotos, miles. Menciones en medios de comunicación, según la auditora Ejes, más de 4.000: una acción de RSE de la empresa de correo y logística Andreani de ofrecerse pro bono a distribuir la vacuna Sputnik V con sus camiones frigoríficos le dio a la empresa fundada por Oscar Andreani la mayor visibilidad de su historia.
“Trabajamos toda la Navidad sin parar y fuimos preparando a los medios para informar cómo sería el operativo”, dice una fuente de la empresa.
Así medios como el canal de noticias TN estaba preparado para captar la bajada de la caravana de camiones por la autopista cuando venían del aeropuerto de Ezeiza.
El equipo detrás del éxito de impacto que probablemente llegue al Guiness como la acción de RSE y de PR de más impacto visual de una empresa argentina -ofrecerse a distribuir gratuitamente la polémica vacuna rusa Sputnik- está liderado por la ex Petrobras Verónica Zampa, gerenta de Comunicaciones y Sustentabilidad de Andreani, la jefa de Comunicaciones Bárbara Dadante, una ex Urban, y Juan Cruz Mansilla, ex Clarín.
El lobbyista Santiago Rossi los acompañó en sus vínculos con los funcionarios que fueron intensos a lo largo de ese período, como reunirse en pleno día de Navidad con Carla Vizzotti, la número dos del ministerio de Salud y que tuvo a su cargo toda la polémica “operación Moscú” para conseguir la vacuna vendida al gobierno argentino por el mandamás ruso Vladimir Putin.
La acción de PR les permitió mostrarse ante los medios como líder en distribución de medicamentos y obtener una presencia de marca que ninguna campaña de publicidad puede pagar.
Ahora el desafío de Andreani es colosal: cómo mantener la altísima exposición de su marca libre de crisis. Un ejemplo es el choque que sufrió uno de sus camiones frigoríficos en la Ruta 5, en la que estuvo involucrado un muerto. Los titulares de los medios locales enfocaron, previsiblemente, en la vacuna: “no llevaba vacunas” era uno de los titulares.
Por otra parte, en Andreani son conscientes de que si la pandemia de COVID se suma a la ya existente grieta política, entre cuarentenistas, anticuarentenistas, antivacunas y vacunistas, las crisis serán difíciles de evitar. Pero, más que nada, la polémica vacuna rusa, objetada por parte de la comunidad científica por falta de publicación de datos de su última fase de ensayos, se coloca en el fondo más profundo de esas grietas políticas e ideológicas. Cualquier error para un lado o para el otro, siempre tendrá a la marca Andreani en el ojo de la tormenta.
Mientras todo salga bien, la acción de PR y RSE podrá colocar durante años en el imaginario colectivo como un Papá Noel que ayudó a traer la vacuna salvadora que ayudó a terminar con la pandemia en Argentina. Eso le permitirá avanzar un par de casilleros. Mientras todo salga bien.
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