Kona, la apuesta de Personally para dejar atrás el pasado

Finalmente, el rebranding de Personally quedó completo con el relanzamiento bajo la misteriosa marca de Kona Consultores en Comunicación. Personally, la consultora fundada por Alicia von der Wettern hace más de un cuarto de siglo y ahora dirigida por el CEO Marcelo Altuna, había atravesado tres años atrás una grave crisis que le hizo perder a casi todos sus clientes luego de que en el Día de la Mujer (8 de marzo) de 2018 ex empleadas se lanzaran a las redes sociales a denunciar a Altuna por presunto acoso sexual y maltrato laboral.

La decisión del renaming de Personally surgió desde una investigación de mercado, informan allegados, que no habría arrojado resultados halagüeños: la marca estaba dañada por la crisis de su CEO que en su momento la consultora -famosa por su comunicación de crisis- no gestionó eficazmente.

Actualmente von der Wettern está trabajando en proyectos culturales y alejada de la empresa, que luego de la fuga de cuentas debió enfrentar un concurso de acreedores.

Si bien desde Personally no contestaron a la pregunta del significado de Kona, diversas fuentes apuntan a que podría referirse al hawaiano “niña” o “niño”.

Lo cierto es que la página web de la agencia no hace referencia a su staff, ni de que Altuna es el CEO y Gabriela Salice la directora general de cuentas.

Sí en cambio hace referencia a muchas de las cuentas que Personally gestionó en su pasado previo a la crisis y eran la envidia del mercado argentino de consultoría en PR. Entre ellas estaban Arcor, La Serenísima, Dow, Banco Itaú, Volkswagen, General Electric, IBM o Mastercard.

Hoy la agencia apuesta a posicionarse como consultora de PR “B to B”, lo que es comprensible, dado que las marcas de consumo masivo son cada vez más susceptibles al bullying de la peligrosa “cultura de la cancelación”, y el issue acoso sexual -que podría seguir pesando sobre la agencia- es un tema siempre sensible.

Si bien desde la agencia no contestan preguntas, entre los clientes actuales se destaca la empresa de archivos de origen norteamericano Iron Mountain, una de las pocas que le mantuvieron la fidelidad, pese a la crisis, así como Grupo Iraola, dedicado a energía y autopartes, APM Terminal Buenos Aires, la naviera Maersk y la empresa Alimentos Refrigerados (ARSA), heredera de la marca de lácteos Sancor.

Entre sus clientes también está la DAIA, representación política de la colectividad judía en Argentina.