Sujarchuk: de las PR a la intendencia de Escobar: “todas las crisis tienen algo en común”

Empezó su carrera política desde la consultoría en RR.PP.. Hoy Ariel Sujarchuk, intendente reelecto del partido de Escobar en la zona norte del Gran Buenos Aires, por un partido vecinal aliado al kirchnerismo, aprovecha sus conocimientos de comunicación de crisis en la pandemia de coronavirus, que pone mucha presión de la población sobre los jefes comunales del complejo conurbano bonaerense.

Comparte el origen de haber trabajado en comunicación de manera directa con otros alcaldes del conurbano, como su par de Esteban Echeverría, en el sur del Gran Buenos Aires: se trata de Fernando Grey, ex dircom del canal de TV Telefé, hoy en manos de la norteamericana Viacom. Podría sumarse a la partida de alcaldes del conurbano conocedores de los medios a Diego Valenzuela, del hoy opositor Juntos por el Cambio, que tuvo una destacada trayectoria como periodista, además de ser historiador, escritor y economista. Todos ellos fueron reelectos en las últimas elecciones.

Sujarchuk arrancó su carrera creando su propia consultora de prensa, Choice, desde la que le tocó participar en crisis como la causa AMIA, por la voladura del centro comunitario judío, como asistente de comunicación de la fiscalía. Otra crisis en la que le tocó comunicar fue la de un vuelo de la desaparecida línea aérea Southern Winds, una precursora local de las low cost pescada transportando valijas de cocaína a España. Incluso tuvo que lidiar con un accidente fatal en la Facultad de Derecho de la UBA en el que una estudiante murió al caer por el hueco de un ascensor, y los medios la reprochaban a la institución pública falta de mantenimiento.

Desde la UBA, donde llegó a tener un alto cargo de Relaciones Institucionales, en el kirchnerismo dio el salto definitivo a la política en el ministerio de Desarrollo Social de Alicia Kirchner, hermana del entonces presidente.

En 2015, convenientemente con la temporal salida del poder del kirchnerismo, Sujarchuk ganó la intendencia de Escobar, ahora reelecto, en alianza con el kirchnerismo. Obtuvo con corte de boleta 10 puntos más de votos que el propio presidente Alberto Fernández en ese distrito.

Sujarchuk tuvo su gran prueba de fuego cuando tuvo que anunciar el primer caso de coronavirus autóctono en ese municipio de casi un cuarto de millón de habitantes y fue foco de los medios nacionales: se trataba de la dueña de un almacén que había atendido a decenas de clientes, con el consabido pánico que la información generó en la zona.

“Esta es una crisis de manual, con la salvedad de que las crisis típicas son más cortas. Ninguna crisis que recuerde fue tan larga”, dice el intendente de Escobar.

Sujarchuk elogia la comunicación de crisis en la pandemia y cuarentena del presidente Alberto Fernández. “Tiene que haber un comandante en una crisis tan compleja, y lo veo bien plantado”. Indirectamente también es un elogio para el equipo de comunicación liderado por Juan Pablo Biondi.

Ariel Sujarchuk asegura que la comunicación para él es algo del pasado, pero aunque tiene como jefa de comunicación a Daniela Nieremberg, una ex conductora de radio y al ex Clarín Juan Pablo Casas, está en el detalle: en su municipio hay cuatro emisoras de radio locales, un diario, una señal de TV y nada menos que diez portales con noticias locales sobre Escobar y esa parte de la región norte del Conurbano bonaerense. Demás está aclarar que tienen al gobierno municipal como uno de sus principales anunciantes, como gran parte de los medios locales.

Como sus mensajes en la pandemia no siempre están vinculados a temas de salud, que son más bien provinciales y nacionales, tiene que llegar a sus vecinos con comunicaciones más prosaicas, como aclarar que está prohibido podar árboles durante la cuarentena para no saturar los servicios municipales.

Pero más que el problema del virus, en su distrito, aun no siendo de los más pobres del conurbano, estima que viven unas 30.000 personas en la indigencia que incluso están fuera del alcance de asignaciones estatales y viven de “changas” que no ya pueden hacer, y hoy los deben asistir con alimentos, en algunos casos con el Ejército.

Sujarchuk dice que es optimista y que “cuando logremos aplanar la curva de la pandemia, tendremos una sociedad más unida”. Argentina sufrió muchas crisis, y eso no sucedió. Y aunque nuevamente es improbable que suceda, por lo menos es un buen augurio.