Burson analizó 264 cuentas de dirigentes en 125 países. Las conclusiones indican que más de un cuarto de todos los líderes mundiales y gobiernos sigue al presidente estadounidense Barack Obama. Por su parte, @BarackObama sigue sólo al primer ministro ruso, Dmitri Medvedev, y a su par noruego, Jens Stoltenberg, pero no estableció relaciones vía Twitter con ninguno de los otros líderes mundiales que lo siguen.

El Presidente de la Unión Europea, Herman van Rompuy (@euHvR), es el líder mundial más conectado, siguiendo mutuamente a otros once pares. La primer ministro australiana Julia Gillard (@JuliaGillard) es la número dos entre los líderes mejores conectados. En contraste, los presidentes de Rusia, Vladimir Putin, y de Ruanda, Paul Kagame; los primeros ministros de Singapur, Lee Hsien Loong, y de Holanda, Mark Rutte, y otros 35 líderes no siguen a ninguno de sus pares en Twitter, quedándose afuera de la conversación.

Los líderes mundiales que más conversan en la red de microblogging son el primer ministro de Uganda, Patrick Mbabazi, y el presidente Kagame, utilizando el 96% y el 93% de sus tweets para responder.

“Este estudio muestra cómo Twitter está cerrando la brecha comunicacional entre nosotros y nuestros líderes mundiales”, dijo al site The Holmes Report Jeremy Galbraith, gerente general para Europa, Oriente Medio y áfrica en Burson-Marsteller.

“Por un lado, permite a jefes de Estado y gobiernos difundir sus actividades diarias y noticias de gobierno a una audiencia cada vez más numerosa; por el otro, permite a los ciudadanos acceso directo a sus líderes. Por consiguiente, es crítico que los líderes mundiales aprovechen la red social”, puntualizó Galbraith.

El estudio reveló que los políticos suelen descubrir Twitter durante las campañas electorales, pero que una vez elegidos sus cuentas tienden a quedar inactivas. Las cuentas de la presidente brasileña Dilma Rousseff (@DilmaBR) y del presidente francés François Hollande (@FHollande) fueron abandonadas una vez que asumieron. De 120 cuentas personales, sólo 30 líderes mundiales twitean personalmente y, por lo tanto, sólo ocasionalmente.