Iván Rodríguez y Julio Pizetti proponen mejorar la imagen del sector con normas para encuestadoras éticas

Un grupo de consultores de opinión pública de la provincia de Salta decidió cargarse al hombro el problema de reputación de las empresas de investigación de opinión pública de la Argentina. La idea de Julio Pizetti e Iván Rodríguez, de Datamática, es crear en la Argentina una asociación con un estándar de calidad del tipo ISO, similar a una asociación mexicana.

A raíz de la debacle de numerosas consultoras que midieron para el gobierno de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner y ahora están sospechadas de haber participado en una operación desinformación para la campaña electoral, los salteños estiman que todo el sector quedó cuestionado ante la opinión pública.
De hecho una encuesta de ARESCO (Julio Aurelio) realizada en 2007 para el programa La Hora de Maquiavelo indicaba que el 95% de la población en el área metropolitana descreía de encuestas de opinión sobre temas políticos publicados en los medios.
Más de media docena de encuestadoras habían publicado hasta el final de la campaña electoral de junio de 2009 que el ex presidente Kirchner iba a ganar ampliamente contra su retador, Francisco de Narváez, en las legislativas de la provincia de Buenos Aires. Muchas de esas encuestadoras también venían publicando en los últimos años datos falsos de imagen y aprobación del Gobierno.
Pizetti, de Datamática, explica que invitará a las agencias que quieran sumarse a organizar una asociación que avale su credibilidad y calidad de trabajo otorgando una suerte de sello de calidad. De hecho, la salteña Datamática se jacta de ser la primera y única encuestadora con certificación ISO 9001 de la Argentina.
“La disciplina está muy cuestionada en la Argentina, y ahora pagan justos por pecadores, y eso no está bien”.
La propuesta de Datamática es invitar a colegas a sumarse a una asociación inspirada en la mexicana AMAI, que es la Asociación Mexicana de Agencias de Investigación de Mercado y Opinión Pública. Se fundó en septiembre de 1992 con la finalidad de establecer normas de calidad y estándares comunes en métodos.
Su objetivo también es divulgar y hacer respetar, entre sus afiliados los códigos de ética y de estándares de práctica profesional que establece la asociación, así como las guías de conducta a los que está adherida.